Las autoridades de la región semiautónoma del Kurdistán iraquí han informado este viernes de que cuatro empleados yemeníes han muerto tras un ataque llevado a cabo con drones contra Jor Mor, un campo gasístico gestionado por la empresa emiratí Dana Gas y situado en la provincia de Sulaimaniya, en el norte de Irak.

"Estos repetidos ataques deben cesar (...) El Gobierno federal debe encontrar a los autores de este acto terrorista y llevarlos ante la justicia", ha explicado el portavoz del Gobierno de la región semiautónoma, Peshawa Hawramani, en la red social X.

Asimismo, ha indicado que el campo "ha sufrido graves daños, lo que repercutirá en la escasez de electricidad". Hawramani ha agregado en otro mensaje en la citada red social que el ataque, de hecho, ha provocado una disminución de energía de unos 2.500 megavatios.

Por su parte, el alcalde del distrito de Chamchamal, Ramik Ramazan, ha detallado a la agencia kurda de noticias Rudaw que los impactos se han producido "en el mismo lugar que la última vez", en alusión a otro ataque que se produjo el pasado 26 de enero contra el campo de Jor Mor.

El Ministerio de Electricidad de la región se vio obligado a suspender la producción de energía eléctrica debido a que el ataque generó un incendio en las instalaciones, que producen 452 millones de pies cúbicos de gas (12,7 millones de metros cúbicos) al día.

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