Este domingo se ha informado del hallazgo de siete cuerpos en avanzado estado de descomposición a las afueras de la localidad de, Mangina, territorio de Beni, en la provincia congoleña de Kivu del Norte.

La delegación de la gobernación en Mangina ha indicado que las víctimas eran aldeanos que fueron ejecutados con machetes por milicianos de las Fuerzas Democráticas Aliadas (ADF), vinculadas a Estado Islámico, antes del ataque de este grupo en el que murieron tres personas el pasado domingo también en Mangina.

"Son vecinos de mi localidad. Los cuerpos fueron hallados en sus campos, fuera de mi comuna. El día que las ADF tenían planeado venir y atacar Mangina, cualquier campesino que se encontraban era masacrado", ha relatado el alcalde de Mangina, Rocky Muvunga, en declaraciones al porta congoleño Actualité.

Los cuerpos fueron localidados por jóvenes de la zona que alertaron a los wazalendo (patriotas en suajili), los grupos de autodefensa. "Descubrimos siete cuerpos, incluidos los de dos mujeres cerca de Taha y Basisale. Nos acompañaban los wazalendos de Butuha. Todos los cuerpos estaban enterrados y en descomposición", ha explicado un líder juvenil local, Kakule Mbafumoja.

Las ADF son un grupo ugandés creado en la década de los noventa extremadamente violento al que Naciones Unidas imputó entre otros crímenes el asesinato de 1.200 civiles en 2021.

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