El inicio del juicio por la muerte de la periodista británica Lyra McKee, que falleció en abril de 2019 tras recibir un disparo en la cabeza durante un tiroteo registrado en Londonderry, se ha aplazado debido a la existencia de cuestiones legales "sin resolver", tal y como ha especificado la Fiscalía.

Tres personas se encuentran imputadas por su muerte, que se produjo cuando cubría una serie de disturbios registrados en la zona de Creggan, en la citada localidad norirlanesa. Contra los tres acusados, Peter Cavanagh, Jordan Gareth Devine y Paul McIntyre, pesan cargos por asesinato.

No obstante, también se enfrentarán a cargos por posesión ilegal de armas y munición, además de por lanzar artefactos incendiarios, según informaciones del diario The Irish Times .

Así, el arranque del juicio, previsto para este mismo lunes, ha sido suspendido hasta este martes una vez la Fiscalía resuelva los asuntos legales que quedan pendientes. Además, otras siete personas serán juzgadas por provocar disturbios y lanzar cócteles molotov durante las protestas, pero no han sido vinculadas al asesinato de la periodista, que tenía 29 años cuando murió.

Poco después del incidente, el grupo Nuevo IRA reivindicó la responsabilidad por su asesinato, que fue condenado por los líderes políticos de Irlanda del Norte y de la comunidad internacional.

McKee, que tenía previsto publicar un libro con sus investigaciones sobre el asesinato del parlamentario Robert Bradford por parte del IRA en 1981, colaboró con muchos medios de comunicación británicos. En junio de 2020, la Policía encontró la pistola que mató a la periodista durante un registro en la zona de Ballymagroarty, en Londonderry. McKee era también una destacada defensora de los derechos de la comunidad LGTBI y de la igualdad para las parejas del mismo sexo en Irlanda del Norte.

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