El portavoz del Pentágono, el general Patrick Ryder, ha hecho este martes un llamamiento al Gobierno de Irak para que "tome todas las medidas necesarias para garantizar la seguridad de las fuerzas estadounidenses" ante el reciente ataque atribuido a una milicia iraquí proiraní contra una base estadounidense en territorio sirio.

"Irak es un socio importante y valoramos mucho sus contribuciones para abordar las amenazas regionales", ha indicado durante una rueda de prensa el portavoz, después de advertir de que "si estos ataques continúan" no dudarán "en defender" a sus fuerzas, tal y como lo hicieron "en el pasado".

Así, ha confirmado que este lunes grupos de milicias "malignas" de Irán "llevaron a cabo dos ataques infructuosos contra las fuerzas estadounidenses en Irak y Siria", siendo los primeros ataques a instalaciones de la coalición desde el 4 de febrero. "Estos ataques ponen en riesgo al personal iraquí y de la coalición", ha subrayado.

Las autoridades iraquíes informaron el domingo de un ataque con proyectiles desde su territorio contra una base de Estados Unidos en Siria, que habría desencadenado un bombardeo estadounidense contra los puntos de lanzamiento. Este ataque se produjo tras el encuentro en Washington entre el primer ministro iraquí, Mohamed Shia al Sudani, y el presidente de Estados Unidos, Joe Biden.

Después de que numerosos medios de comunicación publicasen que la milicia iraquí proiraní Kataib Hezbolá había reiniciado sus ataques contra las fuerzas estadounidenses en la región, esta lo ha negado y ha atribuido el supuesto comunicado a "noticias falsas".

Kataib Hezbolá anunció a finales de enero la suspensión de sus ataques contra Estados Unidos tras la muerte de tres militares estadounidenses en Jordania. A este grupo se suman otras afinaes políticamente como Kataib Sayid al Shuhada, Asaib Ahl al Haq o Harakat Hezbolá al Nujaba, para conformar la Resistencia Islámica de Irak.

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