Al menos seis palestinos han muerto en un asalto de fuerzas militares israelíes en Deir al Ghusun, al norte de la ciudad cisjordana de Tulkarem, donde los soldados han derruido una vivienda donde se escondían presuntos terroristas.

Los militares se han llevado cinco de los cuerpos de los fallecidos, cuya identidad no ha trascendido, informa el diario palestino Al Quds en su edición digital.

Tras la retirada de las fuerzas israelíes, ya en la tarde del sábado, personal de la Media Luna Roja palestina pudo entrar en la zona y recuerar un cuerpo de entre los escombros. El cadáver ha sido trasladado al Hospital Gubernamental Mártir Thabet de Tulkarem.

Las Fuerzas Armadas israelíes han informado de una operación contra presuntos terroristas y de tácticas contra el edificio para forzar la salidad de los milicianos.

A primera hora de la mañana una excavadora israelí ha destruido parte del edificio y los militares han lanzado bombas sónicas y de humo para forzar la salida de los ocupantes. Después de trece horas de operación militar se ha hallado el cuerpo de una de las víctimas entre los escombros.

Un vídeo publicado en redes sociales y cuya autenticidad no ha podido ser verificada muestra a militares israelíes disparando a dos de los individuos que había dentro del inmueble cuando intentaban salir de entre los escombros.

El edificio objetivo de la operación militar israelí tiene dos plantas y era propiedad de Bashir Badran, fallecido hace ya varios años. En el lugar vivían dos de sus hijos y ahora era propiedad de Salama Bashir Badran, un antiguo preso palestino que ha sido detenido tras salir de entre los escombros.

Los sospechosos serían según Israel los responsables del atentado del pasado mes de noviembre en el que murió un militar israelí a la entrada de Beit Lid, al este de Tulkarem.

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